Al igual que ocurrió recientemente con el paciente que recibió un corazón de cerdo modificado genéticamente, esta semana la ciencia nos sorprende con el trasplante de dos riñones de cerdo modificados genéticamente para evitar el rechazo por parte del sistema inmunitario a un hombre de 57 años de edad con muerte cerebral en los EE. UU. Los riñones no fueron rechazados durante las 77 horas que duró el experimento.
Los riñones procedían, precisamente, de la misma línea de cerdos modificados genéticamente que permitieron sobrevivir a David Bennett desde el pasado 7 de enero; esto es, presentaban las mismas modificaciones genéticas. Si bien Bennett recibió el corazón de cerdo porque no había otras opciones para él (un caso de vida o muerte), el trasplante de riñón se realizó únicamente como una prueba inicial.
La mayoría de estas modificaciones genéticas en órganos animales están destinadas a reducir el riesgo de que el cuerpo humano rechace un trasplante. Por ejemplo, carecen de tres genes que codifican carbohidratos específicos que en el cuerpo humano pueden desencadenar una reacción inmunológica agresiva.
Jim Parsons, el actual paciente objeto del experimento, llevaba con soporte vital desde que los médicos decretaron su muerte cerebral tras sufrir una lesión traumática en la cabeza. Una vez recibido el permiso de su familia, ya que el sujeto era donante de órganos registrado, los científicos evaluaron las posibilidades de trasplantar los dos riñones al paciente.
Para sorpresa de todos, los riñones de cerdo trasplantados filtraron sangre, produjeron orina y, lo que es más importante, no fueron rechazados inmediatamente por el cuerpo del paciente. Los órganos permanecieron viables hasta que finalizó el estudio, 77 horas, o más de tres días, después del trasplante en la Universidad de Alabama en Birmingham.
“Este enfoque se basa en la premisa de que tales preguntas deben responderse antes de que los ensayos clínicos de eficacia puedan llevarse a cabo de manera responsable”, escribieron los autores.
El equipo, que publica su hito médico en la revista American Journal of Transplantation, tiene la intención de trasplantar en el futuro riñones de cerdo a pacientes vivos, en ensayos clínicos formales, pero primero querían asegurarse acerca de algunas cuestiones críticas de seguridad. Para ello, llevaron un control exhaustivo del paciente, observando si se detectaban signos de rechazo , transmisión de virus del donante de cerdo o complicaciones quirúrgicas que podrían ser exclusivas del procedimiento de cerdo a humano.
“Este modelo preclínico humano es una forma de evaluar la seguridad y viabilidad del modelo de cerdo a primate no humano, sin riesgo para un ser humano vivo, Nuestro estudio demuestra que se han superado las principales barreras para el xenotrasplante humano, identifica dónde se necesitan nuevos conocimientos para optimizar los resultados del xenotrasplante en humanos y sienta las bases para el establecimiento de un nuevo modelo humano preclínico para estudios posteriores”, aclara Jayme Locke, director del Comprehensive Transplant Institute y cirujano principal de la investigación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario