Científicos del Centro de Luxemburgo para sistemas Biomedicina (LCSB) de la Universidad de Luxemburgo han injertado neuronas reprogramadas, a partir de células de la piel, en los cerebros de ratones, por primera vez, con la estabilidad a largo plazo.
Seis meses después de la implantación las neuronas se habían integrado totalmente a las funciones del cerebro. Este éxito aumenta la esperanza de terapias futuras que sustituirán a las neuronas enfermas con las sanas en el cerebro de pacientes con enfermedad de Parkinson, por ejemplo. Los investigadores publicaron sus resultados en Luxemburgo en el último número de Informes de Células Madre.
El grupo de investigación incluyó al Dr. Jens Schwamborn y a Kathrin Hemmer, quienes están trabajando continuamente para desarrollar la terapia de reemplazo celular como un tratamiento para enfermedades neurodegenerativas. Las neuronas enfermas y muertas en el cerebro pueden ser reemplazadas por células nuevas. Esto podría algún día curar trastornos como la enfermedad de Parkinson. El camino hacia el éxito de la terapia en los seres humanos, sin embargo, es larga.
"Los éxitos en la terapia humana todavía están muy lejos, pero estoy seguro de que existirán terapias exitosas de reemplazo celular en el futuro. Nuestros resultados de la investigación nos han dado un paso más en esta dirección", declaró el profesor investigador de células madre Schwamborn, quien dirige un grupo de 15 científicos de LCSB.
En sus últimas pruebas, el grupo de investigación y sus colegas del Instituto Max Planck, el Hospital Universitario de Münster y la Universidad de Bielefeld lograron crear un tejido nervioso estable en el cerebro de las neuronas que habían sido reprogramadas a partir de células de la piel. Los ratones tratados no mostraron efectos secundarios adversos, incluso seis meses después de la implantación en las regiones del hipocampo y la corteza del cerebro. De hecho, todo lo contrario, las neuronas implantadas se integran plenamente en la compleja red del cerebro.
Las neuronas exhibieron actividad normal y se conectaron a las células cerebrales originales vía sinapsis recién formadas, los puntos de contacto entre las células nerviosas. Las pruebas demuestran que los científicos están teniendo una mejor comprensión sobre cómo tratar este tipo de células con el fin de sustituir con éxito el tejido dañado o muerto.
"Sobre la base de los conocimientos actuales, ahora se busca específicamente en neuronas que mueren en el cerebro de los pacientes de Parkinson, es decir, neuronas productoras de dopamina", informó Schwamborn.
En el futuro, las neuronas implantadas podrían producir dopamina directamente en el cerebro del paciente y transportarla a los sitios apropiados. Esto podría resultar en una cura real, como ha sido imposible hasta ahora. Los primeros ensayos en ratones están en curso en los laboratorios LCSB en el campus universitario de Belval.
Puedes leer la investigación completa LCSB.
No hay comentarios:
Publicar un comentario