Fundada en 1910 para ser un centro de alta atención médica en México, este establecimiento psiquiátrico fue deteriorándose con el paso del tiempo hasta convertirse en un lugar donde reinaba la violación de los derechos humanos.
Al igual que esta institución, otras en todo el mundo encierran historias atroces de falta de ética y violación de los derechos fundamentales. ¿Qué ha hecho la ciencia al respecto?
Ética para la vida
La bioética es una interdisciplina que estudia y analiza, los efectos y las consecuencias de las intervenciones humanas en los seres vivos y el ecosistema.
Nacida a partir de disciplinas como la biología, la medicina, las ciencias políticas, la filosofía, la antropología, el derecho y la sociología, la bioética surgió a raíz de los problemas éticos de la medicina y los daños ambientales que acompañaron el siglo XX.
“Cuando la medicina se hace institucional y se masifica, se perdió el estrecho vínculo entre médicos y pacientes. También se volvió más tecnológica y la relación entre las instituciones médicas, los investigadores y las personas se desequilibró. Durante el siglo XX hubo muchos casos de violación de derechos fundamentales de los pacientes tanto en los hospitales como en proyectos de investigaciones.”
Tal es el caso del hospital psiquiátrico La Castañeda o de los experimentos realizados durante el Holocausto por médicos nazis; estos últimos de tal impacto que al término de la Segunda Guerra Mundial derivaron en el Código de Núremberg donde se establecieron los principios de la experimentación con seres humanos.
“En cuanto a los problemas ambientales, el desarrollo tecnológico e industrial generó efectos muy negativos como la desaparición de especies, la pérdida de la biodiversidad, los problemas de salud pública que comenzaron a ser más evidentes después de la segunda mitad del siglo XX”, relata el doctor Linares, quien dirigió el Programa de Bioética de la UNAM.
Actualmente los objetivos de la bioética son requilibrar el desarrollo humano, científico, industrial y tecnológico con la naturaleza, asumiendo las responsabilidades y los deberes para evitar la destrucción ambiental.
Los problemas que atiende se extienden a la experimentación humana, la experimentación con animales, la regulación adecuada del tránsito de material biológico, la eutanasia, el suicidio asistido o el aborto, entre otros.
En este sentido, dice el investigador, el Derecho cobra vital importancia en relación con la bioética. “Aunque no todo lo que implica la bioética tiene que ver con una regulación normativa, las intervenciones de esta sí, por lo que es importante el marco legal donde se dan”.
Ejemplo de ello lo tenemos en México con el tema del aborto. “Solo en la ciudad México hay intervención legal del embarazo. En el resto del país no. Este es un problema bioético de fondo, porque sigue una prohibición que afecta los derechos de las mujeres”.
Es fundamental la formación bioética de los estudiantes en ciencia porque “no solo tendrían que darse cuenta de su responsabilidad como personas que desarrollan y aplican conocimiento sino también porque deben conocer los marcos legales donde ejercen”.
Es por eso que el Programa Universitario de Bioética de la UNAM cuenta con una red de colaboradores de la institución y externos que tienen como fin generar un diálogo y debate social, científico y filosófico sobre los problemas contemporáneos de bioética.
Para hacerlo cuentan con diferentes actividades como publicaciones, colaboraciones con Radio UNAM, TVUNAM, un portal web sobre sus actividades, así como ciclos gratuitos de cine debate, diplomados, cursos de educación continua así como cursos de licenciatura abiertos a los estudiantes tanto de ciencia como de otras áreas.
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