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miércoles, 11 de junio de 2014

Secuoyas gigantes

Por Jimena
Secuoyas, Gigantes del Bosque pueden llegar a ser los árboles más altos del planeta. Pueden producir madera, crear puestos de trabajo, conservar limpios los ríos y albergar incontables especies del bosque.

Sequoia sempervirens, Conocida en Estados Unidos como "secoya de la costa", "secoya de California", o bien "Secoya" o "Palo Colorado" en español, es una especie nativa de EEUU-California, donde se extiende desde el extremo sudoeste del estado de Oregon (Lat. 42 ° 09 'de latitud norte) hasta el sur del condado de Monterrey (latitud 35 ° 41' N), formando una franja irregular en la costa de 724 kilómetros de largo generalmente y 8 a 56 Km de ancho.
La primera descripción escrita de los bosques de secoya se atribuye al padre Juan Crespi, un misionero franciscano que recorrió desde San Diego hasta Monterrey en 1769.
Los estudios de esta época señalan que a la llegada de los europeos existían alrededor de 650 mil hectáreas a 770 mil hectáreas de Secoya. Desde entonces, se estima que unas 40 mil hectáreas se han perdido por la conversión a otros usos.
Sin embargo, a pesar que la superficie ha declinado muy poco en los últimos 150 años, el tipo de bosque ha experimentado alteraciones como resultado de la intensa explotación del que fueron objeto durante las primeras décadas del siglo XX, para su utilización principalmente como madera aserrada, para el levantamiento de las viviendas en ciudades como San Francisco, Los Ángeles, San Diego y otras, como así también en otros variados usos (durmientes, papeleras, postes, silos, y otros).
Hoy en día, (2002 de acuerdo a las estadísticas de California Redwood Association), la superficie de Secoya sería de 704 mil hectáreas, siendo alcalde de la parte (74%) de los bosques de secoya relativamente jóvenes, constituyendo los llamados bosques de "segundo crecimiento "bosques de segundo crecimiento", en tanto que los bosques originarios, de gran tamaño y edades, denominados como "edad madura", prácticamente han desaparecido, estimándose que aproximadamente sólo cubrirían el 10% del total de la superficie de bosques de Secoya, estando la mitad preservada en parques estatales y federales (Evarts y Popper, 2001).
En la zona de la Costa Norte, desde el límite de Oregón hasta un poco más al norte de San Francisco, Los bosques de Secoya forman una franja casi continua.
En esta franja que cubre 4 condados: del norte, Humboldt, Mendocino y Sonoma (en los cuales se encuentra el 88% de los bosques de Secoya) Se encuentran los especímenes y rodales de Secoya más antiguos, ampliamente reconocidos en el mundo por que alcanzan dimensiones sobre los 100 m de altura en algunos casos.
Al sur del condado de Sonoma, los bosques de Secoya son discontinuos y se encuentran altamente fragmentados hasta llegar al final de su rango de distribución.
Del total de la superficie de Secoyas, serian un 80% de propiedad de privados y el 20% restante pertenecería al sector público, siendo en este último caso, en su mayoría (85%) bosques que estan dentro del sistema de áreas silvestres protegidas (parques del estado de California, parques de ciudades y condados, el parque nacional Redwood, servicio forestal y monumentos nacionales).
La madera de Secoya es de amplio uso debido a sus favorables características, tales como: dureza, durabilidad natural, trabajabilidad, estabilidad dimensional, adherencia a pintura y barnices y estar libre de resinas, típicas de la madera de coníferas.
Por su durabilidad, combinada con su dureza y su disponibilidad en grandes dimensiones, se la utiliza fundamentalmente en construcciones, en una gran variedad de aplicaciones, desde aquellas rústicas (principalmente en artículos y madera de uso en exterior), hasta aquellas más decorativas para uso interior y exterior de viviendas.
Además, debido a su color y resistencia, es usada en la construcción de muebles, aunque en mucho menor proporción, utilizándose muchas veces para esto, madera reciclada de antiguos estanques de agua y silos en desuso.

1 comentario:

  1. wow! y pensar que estamos tan cerca de esta maravilla natural y no lo conocía. Ahora se ha despertado mi interes por ir. Gracias por mostrar y darse el tiempo de comunicar el conocimiento.

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